Empiezo a creer que la mayoría de mis buenos amigos están en España. No, no es broma. Lo siento así. Hay gente con la que me comunico casi a diario y con la que de alguna forma se ha vuelto parte de mi vida. Gente que ha confiado en mí a la hora de recibir un criterio sobre su obra o que se ha encargado de extender mis letras hasta sus territorios. Gente que a pesar de estar a cientos y cientos de kilómetros ha sabido darme una palabra de aliento llegando a desafiar a la distancia. Sé que si fuese por ellos hubiesen abierto sus alas y volado hasta Kitu para darme fuerzas en esos momentos en los que estuve por abajo y sola, porque quien creía que estaría a mi lado, aquí, no estuvo. He llegado a celebrar sus aciertos y comerme mierda si algo no anda bien por sus vidas. Yo misma me sorprendo porque me ha pasado que a veces, aun viviendo en la misma ciudad, pueden pasar semanas, meses, incluso años y no verme con alguien con quien he quedado en hacerlo desde hace tiempo. Claro, sé que no está bien. Puede ser que en ocasiones como nos sentimos tan cercanos -geográficamente hablando- no somos capaces de enviarnos cartas o hacer una llamada corta o encontrarnos en algún Café. El punto es que me fascina el nexo que he unido con mis partners al otro lado del charco. Me gusta aprender de ellos y con ellos. Porque al final es eso: un aprendizaje. Me motiva saber que a más de uno le gusta seguirme la pista, contagiarse con mi ritmo. Compartir.
.
Hace poco mi amigo el realizador zamorano Mario Crespo, escribió un artículo en la Opinión de Zamora que me gustó mucho, titulaba: Los Nuevos Shandys. En ella, Mario nos habla, a propósito del libro de Enrique Vila-Matas: Historia abreviada de la literatura portátil, de los shandys, y re-ubica algunas concepciones que tenían sus integrantes para situarlo en nuestros días. Dice Mario:
.
"La ficción sobre la conspiración shandy indica que este grupo nació en 1924 como producto de una serie de casualidades, equívocos y malas interpretaciones, y que estaba formada por algunos de los artistas más célebres del momento. Marcel Duchamp, Georgia O´Keefe, García Lorca, Alberto Savino, Scott Fitzgerald, o Walter Benjamín, fueron algunas de las supuestas cabezas visibles del grupo. Para pertenecer a la conspiración había que cumplir ciertos requisitos. El más importante de todos era que la obra de todos los artistas del grupo fuera portátil, es decir, que se pudiera trasladar fácilmente en un maletín. También se requería poseer ciertos rasgos de sexualidad extrema (expresión claramente dadaísta), funcionar como una perfecta máquina soltera, no tener grandes propósitos, tener una tensa convivencia con tu doble y hacer gala de un nomadismo infatigable.La premisa de realizar obras potencialmente portátiles va directamente contra el anquilosamiento del arte, contra lo estático. Marcel Duchamp fue el primero en poner en tela de juicio el propio concepto de Arte; desde su más remoto interior hasta el del espectador. Fue un visionario de los formatos, se adelantó muchas décadas a la era que estamos viviendo actualmente, al la del boom de la información, a la de los procesadores y los microchips. Con su sorna habitual sorprendió al mundo con su Boîte-en-valise, una maleta que contenía la reducción de todas sus obras. Un museo andante. Una especie de disco duro portátil, de USB, de memoria virtual. Lo que conceptualmente nos aportó el genial francés son cosas que a día de hoy damos por asumidas. Por ejemplo que un artista pueda guardar toda su obra en un espacio físico menor al de una moneda.Uno de los productos de esa revolución tecnológica directamente relacionada con la sociedad de la información en que vivimos son los blogs. Los blogs son cuadernos de bitácora virtuales que otorgan a sus administradores la posibilidad de utilizarlos como su propia Boîte-en-valise, su caja maletín, su sala de exposiciones virtual. Textos cortos, relatos, artículos de opinión, cuentos, microrrelatos, críticas, vídeos, fotografías? Todo cabe en los blogs. Estos espacios virtuales se suelen enlazar unos con otros formando comunidades afines. Los anillos de bloggers se mueven circularmente en la inmensidad de la red, retroalimentándose constantemente en pos de nuevas aportaciones. Con herramientas informáticas como ésta, el concepto portátil de los shandys consigue traspasar lo figurado para llegar a lo literal. Personalmente, suelo frecuentar los blogs de arte, principalmente los de cine y literatura. Cuanto más profundizo en la blogsfera, más me recuerda a la ficción creada en la novela de Vila-Matas. Lo portátil, el nomadismo, la individualidad, la escritura romántica que exhibe sus textos sin pudor, sin derechos, sin que se publiquen en otro sitio. En Blogger es posible descubrir auténticos artistas. Artistas de culto que se mueven en círculos no comerciales. Artistas de verdad. Gente que se entrega a la causa aunque la causa les maltrate. Poetas, narradores, dibujantes o directores de cine que se juntan en la red para presentar libremente su obra, para no tener que pagar por la necesidad de expresarse, para saltarse a la torera las antiguas leyes de control expresivo, las de la despótica industria."
.
........... Y hoy, en la mañana, encuentro en el blog de Mario un post titulado Aquí unos amigos, en el que da cuenta de esa red que sin pensarlo hemos formado. Y mi sorpresa al encontrar mi "Acto 23", junto a los textos seleccionados.
.
Gracias Mario, amigo, un fuerte abrazo desde mi escondite shandy hacia el tuyo.