Plaza de Constitución. Santiago de Chile
"Estas
son mis últimas palabras y tengo la certeza de que mi sacrificio no será en
vano, tengo la certeza de que por lo menos será una lección moral que castigará
la felonía, la cobardía y la traición".
"El compañero Presidente no abandonará a su pueblo ni su sitio de trabajo. Permaneceré aquí en La Moneda inclusive a costa de mi propia vida".
... y así fue.