sábado, noviembre 10, 2012

Exorcizarnos con un acordeón - La Valse des monstres (Bastián y Niko)




In vino veritas, una luna enorme, jazz libre y más de 24 horas sin dormir. Es la única manera de ver a Santiago amanecer. Estoy abierta a todas los poemas que no saben que son poemas. Los verdaderos músicos son niños, demasiado puros para sacar notas que no caben en un abecedario. Cambio de planes, mañana viajaremos a Valparaíso, Viña del mar, Reñaca, Concón y Mantagua, iremos jalando dedo. Hoy se acaba octubre, escucho en la distancia. Pero yo no sé de horas ni de días ni de meses. Sigue el acordeón abriéndose y cerrándose en mi cerebro. Y en este preciso momento, todo Santiago cabe en esta ventana.