martes, abril 17, 2012

Diario de viaje (fragmento)


photo by Mark. 2012

Madrid, 15 de abril de 2012

¿Dónde -exactamente- comienza el viaje? Los comienzos son siempre decisivos. Dudo si situarlo en Madrid o en el aeropuerto de Quito o en la visita al taita Carlos en las ruinas de Rumichucho o en la cena con mi hermana y mis padres. Retrocedo, entonces, en la memoria, hasta situarme en algún punto de referencia. Sin embargo, uno tras otro son pasillos conduciéndome a un lugar sin nombre y sin fecha. Más allá de mi conciencia, me digo, existe un punto desde el cual me movilizo y seguramente ese fue el inicio. Pero esta escritura es un ritual que viene desde hace muchos meses, años, siglos, y como tal, siempre me permite la ilusión de un nuevo comienzo. “Que nuestras únicas certezas sean nuestras dudas” reza un aforismo. Y otro, de Grahan Green, que dice: “cuando no estamos seguros, estamos vivos”. En efecto, no hay certezas, y está bien que así sea. Un viaje -si es verdadero- ha de estar lleno de dudas. He viajado desde hace mucho tiempo, y, sin embargo, es aquí donde comienzo. Una vez más, extiendo con este trazo las primeras líneas.