Lamentábase Eurípides de no haber podido componer nada más que tres versos en tres días. Alcesticles, pésimo poeta, se burló de él, y a la vez se alabó de haber escrito facilísimamente trescientos en el mismo tiempo.
-Por eso- le dijo Eurípides- hay tanta diferencia entre tus versos y los míos. Los tuyos apenas durarán tres días, y los míos pasarán a la posteridad.
-Por eso- le dijo Eurípides- hay tanta diferencia entre tus versos y los míos. Los tuyos apenas durarán tres días, y los míos pasarán a la posteridad.
De Antología de Anécdotas, Luis Aguirre