sábado, mayo 22, 2010

Nulla dies sine linea (o la aplicación de Apeles a mi diario)

photo by Mark Álvarez, Volare. SF

Cayo Plinio Segundo, más conocido como Plinio el Viejo, escritor latino, científico y naturalista, contaba la historia de Apeles de Colofón, el pintor oficial de Alejandro Magno:


Apelli fuit alioqui perpetua consuetudo numquam tam occupatum diem agendi, ut non lineam ducendo exerceret artem, quod ab eo in proverbium venit. (Naturalis Historia 35.84)

"Apeles tenía, además, el hábito sistemático de no dejar pasar ni un día, no importa lo ocupado que estuviera, sin practicar su arte trazando al menos una línea, y como resultado, su actitud se convirtió en proverbio". (Naturalis Historia 35.84)