lunes, diciembre 28, 2009

Con Tullpucuna en Otavalo-Cahuasquí-Cotacachi


warmikuna
Hace poco regresé de Otavalo. Tuvimos presentación con mi grupo de danza a pocas cuadras de la tradicional Plaza de ponchos. El motivo fue compartir con la comunidad -especialmente con los niños- toda la alegría y el amor de nuestras coreografías, así como la entrega de ropita y dulces a los pequeños de escasos recursos. Fue una jornada agotadora pero muy satisfactoria. Ver las sonrisas de todos esos guaguas es una cosa divina. Yo en lo particular me quedé encantada con niño que sanjuaneaba como los dioses. Fue un honor compartir nuestro trabajo con la gente de esa tierra mágica, y luego a Cahuasquí (en Cotacachi) donde nos esperaba el mashi Miguel en la casa-escuelita no tradicional (algún rato tengo que escribir sobre esa GENIAL labor que Don Miguel lleva a cabo en ese lugar donde la educación rompe con lo que estamos malcostumbrados). Siempre lo he dicho: Otavalo es una de las ciudades más especiales en las que he estado y a la que de vez en cuando tengo la dicha de volver.

público
jilguerito
compañeros Tullpus bailando el wairacapishcaDiablos Uma
Jaimito y Juan Carlossaltashpa
zig zag

niños y niñas de Cahuasquí
Memo y wawita
se siente la fuerza
con algunos wawas con los que bailémi madre, Rocío (mama tullpu) y más niños de la comunidad