domingo, junio 01, 2014

Aviso a algún lector despistado

En el fondo, creo que todo lo demás fueron legítimas excusas: el tiempo, la falta de internet en casa, lo reventada que llegaba a casa luego del periódico. Pero lo cierto es que si dejé de actualizar este blog fue porque muchos cambios se dieron en mi vida. O quizá sólo uno, pero trascendental. Tenía miedo de tener que unir cosas, nuevas rutas, nuevos diarios, nuevos rostros, y que aquello tuviese coherencia con lo que quedaba detrás. Ha corrido mucha agua bajo el puente. No quería, sobre todo, herir a nadie. Pero tampoco tenía fuerzas ni ganas de explicar. Al fin y al cabo, este camino me lo he labrado yo, y ahora son múltiples las voces que me habitan. Sigo habitando ese caos armónico de mi mente, pero he crecido mucho. Lo sé porque mi visión frente a la vida sigue siendo la misma, pero mi proceder, en muchos aspectos, es distinto. Ahora analizo mejor mis emociones, sobre todo porque he estado al borde de varios abismos, y la mirada sobre los seres y las cosas no podría ser la misma. Sigo reinventado la realidad. Amo y soy amada. Con eso y un puñado de barro, como decía un viejo amigo, por hoy me basta. 


(creo que va siendo tiempo de volver a este ring, con la cabeza en alto)