viernes, octubre 13, 2006

Recordar, desde la verdad!

Esbelta su figura, bronceada la piel,
así era él. Indio de la raza pura,
hijo legítimo del sol.
Un día, lo recuerdo, un día,
el amo hizo chasquear
la rienda en el granito de sus espaldas.
...Pobre indio, pobre raza,
hasta de Jesús no le enseñaron
más que la cruz
y la corona de espinas.
Nunca le dijeron que era hermano
del hombre que habla castellano
y a golpes como de las minas
extrajeron de su cuerpo el oro,
por eso no tiene más amigos
que el asno, el perro y el toro,
el que barbecha las tierras
y el que hace brotar los trigos.
Canta mirlo negro, di tu de profundis torcaza;
río que vienes gritando desde arriba,
llora mi dolor y el dolor de la raza.

Fragmento de "Elegía de la raza".
Miguel Angel León.
Ecuatoriano.

Es necesario recordar. Recordar desde lo no visible, recordar desde la raíz de nuestro origen, procurando aprender de la memoria histórica, la de nuestros antepasados. aprender desde la verdad.
Hoy, como todo 12 de octubre, el mundo celebra "El Día de las raza"..."El encuentro de dos mundos"...permítanme escupir.
Arrastramos no solo la historia maquillada de Colón, sino la historia de sus herederos, quienes aún continúan "navegando" con propósitos colonizadores y genocidas.
Afortunadamente, son ya muchos los investigadores históricos, que coinciden en señalar que detrás de todas las mentiras, imprecisiones y enigmas históricos que envuelven la vida de Colón, se esconden motivos graves y comprometedores, que había que guardar como secreto de Estado.
Salvador de Madariaga, en su libro: Vida del muy magnífico señor don Cristóbal Colón, expresa lo siguiente: "Todo ha conspirado para rodear la vida de Colón de tanto misterio, como él parece haber querido. Es difícil resolver el rompecabezas que ofrecen las historiografía de Colón...subsisten dificultades sin resolver y fosos sin franquear, entre el Colón que nos pintan los papeles genoveses, y el que nos revelan las declaraciones del propio almirante".
Pues bien, recordemos textualmente un fragmento de lo que escribiera Colón durante su encuentro con los arawak en las Antillas:
Ellos... nos trajeron loros y pelotas de algodón, lanzas y muchas otras cosas que ellos intercambiaron por cuentas de vidrio y campanillas para halcones. Ellos deseaban transar todo lo que poseían... Están bien constituidos, con buenos cuerpos y hermosos rasgos.... no llevan armas y no las conocen ya que les mostré una espada y la tomaron por el filo y se cortaron ellos mismos por su ignorancia. Ellos no tienen hierro. Sus lanzas son hechas de cañas...
Ellos serían finos sirvientes....
Con cincuenta hombres podríamos subyugarlos a todos y podríamos hacerles hacer cualquier cosa que nosotros queremos.
Colón escribió más adelante: "En el nombre de la Santa Trinidad, continuaremos enviando todos los esclavos que se puedan vender".
Las estimaciones de la población arawak son de 200.000 a 400.000 en el momento de la llegada de Colón, pero en poco tiempo, menos de un siglo, su número se redujo a unos cien. Un informe del año 1650 revela que en la isla no quedaba ni uno solo de los arawaks autóctonos ni de sus descendientes.
En el caso de los Taínos, los motivos principales para su disminución masiva eran su falta de resistencia a las enfermedades introducidas por europeos, sobre todo la viruela, y despiadadamente siendo abusados y torturados por los españoles en minas y granjas. Los españoles también asesinaron a los Tainos en matanzas incontables para tratar de crear la obediencia por el miedo. A este genocidio antecedió el del pueblo Ciboney. Al desaparecer el pueblo Taino, usaron esclavos capturados en África para suplir los requerimientos de mano de obra.1
Como dice el intelectual norteamericano Howard Zinn : "Lo que quiero resaltar aquí no es el hecho de que debamos acusar, juzgar y condenar a quien sea, al contar la historia. Quiero hacer hincapié en que todavía nos acompaña la costumbre de aceptar las atrocidades como el precio deporable pero necesario que hay que pagar por el progreso (Hirosima y Vietnam por la salvación de la civilización occidental, por ejemplo).
Una de las razones que explican por qué nos merondean todavía estas atrocidades es que hemos aprendido a enterrarlas en una masa de datos paralelos, de la misma manera que se entierran los residuos nucleares en contenedores de tierra".2
El tratamiento de los héroes(Colón) y sus víctimas (los indígenas)- la sumisa aceptación de la conquista y el asesinato en el nombre del progreso es sólo un aspecto de una postura sobre la historia que explica el pasado desde el punto de vista de los gobernadores, los diplomáticos y los líderes.
Cabe destacar, y como es lógico, a nuestra América no vino la España culta y progresista en el momento de la conquista, sino la España de la inquisición, de las hogueras, de los sacerdotes crueles y despiadados; la de Fernando e Isabel, la del genocida Colón...sumisos y dominados por la religión romana, con frailes que decían que los indígenas no tenían alma y que se les podía tratar con el mismo rigor que se puede tratar a los animales.
"Conviértanlos o mátenlos
", eran las órdenes de la fanática reina Isabel la católica, para la conversión de los indios al cristianismo.
Recordar!!

Bien lo dice Eduardo Galeano: El sistema desprecia lo que ignora, porque ignora lo que teme conocer. El racismo es también una máscara del miedo. ¿Qué sabemos de las culturas indígenas? ¿Que sabemos de nuestra herencia?

La memoria de América ha sido mutilada por el racismo. Seguimos actuando como si fuéramos hijos de Europa, y de nadie más.
Entonces, se me hace fundamental recordar aquella frase que Tupac Katari gritó a viva voz: “UN DÍA VOLVERE Y SEREMOS MILLONES
... Ya volvimos, estamos aquí somos millones y dispuestos a continuar nuestra lucha.
Un abrazo fraterno a todos los hermanos nativos que día a
día hacen resistencia en cualquier parte del mundo.
Una vez más digo: JATARI, ARI RUNA KUNA KANCHIK!
1Wikipedia. Enciclopedia libre wikipedia.org/wiki/Arawak
2 Howard Zinn. La otra historia de los Estados Unidos.2001